En los medios

ABIERTO DESDE EL AMANECER

ROCIO NAVARRO,CAÑI, 2013

Un clásico bar, inaugurado en 1956 y especializado en oreja y bravas“

Justo en la confluencia entre el Paseo de Extremadura y la calle Francisco Tejada, en el mismísimo corazón del distrito de Latina, se encuentra La Gloria, un clásico bar de barrio, abierto en 1956 y regentado por Luis Miguel Gómez, que heredó el negocio de su padre.

Encantos tiene muchos. Pero los más importantes (contundentes y suculentos) llegan del fogón. De toda su carta, lo que no hay que perderse es la oreja a la plancha, cortada en pequeños trozos, con salsas (la brava es la estrella) o simplemente con limón y servida en potentes raciones.

Además, triunfan las patatas bravas, los huevos estrellados, el lacón braseado, los pinchos de carne, las croquetas caseras, las alitas, los bocadillos y los sándwiches. Para beber, las cañas de siempre en el vaso de siempre, frescas y con un dedo de crema en vez de espuma. Atención a su dilatado horario, con la cocina siempre encendiday a punto para cualquier petición. Y al servicio, de esos de tasca madrileña de siempre, de los que gritan al comensal según entra por la puerta un alegre: '¿Qué le pongo, jefe?'...

UNA DE OREJA A LA PLANCHA

CARLOS MARIBONA, 2014

En el paseo de Extremadura, este pequeño bar familiar lleva más de medio siglo preparando la que probablemente es la mejor oreja a la plancha de Madrid. La cortan en trozos muy pequeños y la acompañan con una buena salsa brava, aunque para quienes no sean aficionados al picante ofrecen la alternativa de aliñarla únicamente con limón. Otras especialidades son las patatas bravas, los pinchos morunos o las croquetas caseras. Aunque nuestra recomendación es para el aperitivo, La Gloria es también un buen sitio para trasnochadores, ya que abre antes de las seis de la mañana.